Nuestra silla está vacía.
Atrás quedó la primavera y el verano.
Sólo hojas secas ocupan nuestro lugar, el que fue testigo de nuestros besos y abrazos.
Que triste es el paisaje ahora que te has ido, desolado, vacío.
Así está mi corazón, marchito, quemado.
Podré volver a amar? Dejar mi corazón desnudo una vez más?
Por ahora veré las hojas caer y dejaré que el invierno venga a mi; esperando que algún día mi corazón vuelva a entibiarse y florecer una vez más.
Hacer Comentario